jueves, 3 de enero de 2013

YO SOLO QUIERO QUE TE MUERAS



Tampoco nos importa demasiado, 
hemos paseado mucho rato
y tú no miras la ciudad en que no habitas; 
el mundo desde arriba se parece a un vertedero
y todo eso es lo que importa. 
Tú ya sabes que tu pelo… 
y sin embargo los pedazos de la calle 
se te cuelgan de otra parte. 
No del cuello o de los brazos que levantas como un golpe siniestro, 
los pedazos de las gentes y sus calles donde fuimos otro ruido
se te cuelgan de algún lado. 
Solo quiero que tu sangre se resbale con las líneas de mi mano 
como un muerto 
y no te importe
porque el mundo ya no importa demasiado. 
Todo eso es fácil. 
Antes me gustaba comprender porqué los niños se agitaban 
allá abajo;
ahora quiero que se maten a pedradas. 
Tal vez por eso me regalas una piedra y no me dices que es un beso, 
tú ya sabes que los muertos se parecen más pequeños, niña tonta…
y sin embargo. 
Te retuerzo y te levanto como a un perro, 
el mundo se parece a un vertedero y decidimos que llenarlo 
con tu cuerpo es lo más fácil. 
Eso está claro. 
[tu madre no soporta tus chillidos 
y sabemos que una madre es como galgo o una puta que se aburre
a cuchilladas]
Si me abrazas es por eso 
y porque todo se hace oscuro y estás cansada.


Será luego cuando quiera retorcerte y te me mueras 
como un niño al que su madre obliga siempre a recoger todas las cosas 
y tirar 
y si es de noche
a la basura.
Es justo 
y solo eso
todo eso lo que tengo que contarte. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario